Este servicio de mensajería instantánea, que fue creado el año 2009 por antiguos trabajadores de Yahoo, es compatible sólo con smartphones, es decir celulares de última tecnología. Bajarlo no cuesta nada y luego de 365 días de uso, Whatsapp cobra una cuota mínima anual.
Pese a que este servicio sólo funciona con celulares modernos, su presencia en el mundo permite a los usuarios (230 millones) compartir momentos emotivos a distancia, en tiempo real y con varias personas al mismo tiempo.
“Yo lo uso para comunicarme con mis compañeros de universidad”, detalla una estudiante de la carrera de Ingeniería Comercial, Andrea Valencia, a tiempo de contar que con Whatsapp se pueden crear grupos de conversación. “Si yo envío: ‘Chicos reunión a las 15:00’, todos lo reciben en sus celulares y yo no pago nada”, agrega Valencia.
Al igual que ella, millones de personas en el mundo sacan provecho a esta aplicación porque -además de texto- permite enviar fotografías, notas de audio e incluso videos. Si una persona sale del país puede acceder al servicio con normalidad, a diferencia de un chip que te da cobertura para enviar sms’s sólo en el país.
Según el psicólogo, Marco Antonio Tapia, este tipo de tecnología elimina las barreras de distancia y genera un escenario de comunicación constante. “Si una persona al despertar lee un ‘Te quiero’ de un ser querido que está a distancia, esto lo hará sentir bien todo el día”, detalla. Es decir, no se tiene que esperar a entrar a la computadora o recibir una llamada para saber de la familia o amigos.
Whatsapp, que en inglés significa coloquialmente ¿Qué pasa?, es equivalente a una red social, sin embargo su diferencia esencial es que es privada.
Whatsapp: un fenómeno como red social privada
Cuando surgieron las redes sociales (abiertas) como Facebook o Twitter muchas personas sintieron que el límite entre lo público y lo privado se estaba borrando rápidamente y que, de pronto, se iba a exponer la vida personal en un ambiente público donde, no necesariamente se conocen a las personas de contactos.
En ese sentido, los “resistidores” digitales han evadido elegantemente el hecho de no tener una cuenta en Facebook por diferentes motivos.
Sin embargo, con la llegada desde hace un tiempo atrás de la aplicación Whatsapp esto ha cambiado drásticamente.
Whatsapp es una aplicación que funciona sólo desde un smartphone (corre sobre Android o iOS), se asocia a su número de teléfono y permite enviar mensajes de texto (SMS) a cualquier teléfono en el mundo entero de forma gratuita (si está conectado a internet y el otro usuario tiene Whatsapp).
Por lo tanto, considere la idea de tener un amigo o familiar que vive en otra parte del país o el mundo, usted puede crear un grupo en Whatsapp (al igual que en Facebook) y agregar a las personas interesadas, padre, madre, hijos, etc y enviar mensajes que pueden ser textos, fotos, audio o videos cortos con los que podrá mantener un estrecho contacto permanente con sus seres queridos.
Este es un fenómeno que ya se encuentra aquí en la ciudad, existen varias familias que lo utilizan con ese propósito, alumnos de universidad de clases completas, padres de familia organizados por el curso de sus hijos, incluso excompañeros de colegio que, mediante su grupo en Whatsapp, se mantienen al día con las novedades personales de cada uno.
Para que se haga una idea, el año 2012 se enviaron 7 mil millones de mensajes y se recibieron 11 mil millones de mensajes en el mundo entero distribuidos en 1300 millones de usuarios.
Ciertamente es una aplicación gratuita para Android aunque en algunas versiones para iOS cobran 0.99 USD después del primer año de uso.
Por otro lado esta herramienta tiene una competencia voraz en el mercado con aplicaciones como Tango, Viber, WeChat, Line, entre otras, sin nombrar el gran conocido Skype.
En ese sentido, la próxima revolución digital será móvil y ya se están viendo los efectos.
Pregunte entre sus conocidos sobre esta aplicación y verá que ha logrado una gran popularidad y que, por lo mismo, está ganando adeptos que fueron reacios a Facebook.
Esto implica que este fenómeno tecnológico ha roto la barrera del tiempo y el lugar (puedes hablar en este momento con tu grupo sin importar el lugar). Es por ello que también ha cobrado relevancia como herramienta de trabajo entre diferentes organizaciones ya que, les permite instruir a sus empleados simultáneamente y lograr una mejor resolución de problemas.
Precisamente, el factor de “privacidad” permite que las personas que uno agregue en esta red, salgan directamente de su lista de contactos en el teléfono, por lo tanto, si quiere utilizar una tecnología que le permita estrechar vínculos con un círculo de personas, esta es la herramienta más interesante actualmente que le llevará a una experiencia digital diferente.
Claramente estará prendido de su teléfono constantemente pero si tiene un ser querido lejos… esa distancia desaparecerá.
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